CAMPAÑA AGUILUCHO CENIZO 2019

En estos momentos en los que me dispongo a contaros algunos detalles del devenir de la campaña de protección del aguilucho cenizo por tierras segovianas, hay un buen número de voluntarios recorriendo la campiña en busca de nidos de la especie, por lo que los datos que os voy a facilitar pueden quedar caducos en pocos minutos.

 Aguilucho cenizo macho

Aguilucho cenizo hembra

El día 27 de abril la campaña de protección del aguilucho cenizo sumó un nuevo hito a su andadura con el radiomarcaje de dos ejemplares adultos en la comarca de Santa María la Real de Nieva; un macho que fue bautizado con el nombre de Olmo y una hembra que recibió el nombre de Jara. Los datos que aporten de aquí en adelante estos dos individuos ayudarán a conocer mejor la biología reproductiva y los movimientos migratorios que realizan entre Europa y África. El radiomarcaje ha sido posible gracias al proyecto de migración de aves que realiza SEO/BirdLife y en especial gracias a Javier de la Puente que es quien se ha desplazado a Segovia a colocar los emisores.

Jara, hembra de aguilucho cenizo radiomarcada. Se puede observar el emisor en la espalda del ave

Olmo, macho de aguilucho cenizo radiomarcado

Hasta el momento se han encontrado un total de 25 nidos, la gran mayoría con huevos en su interior, pero estos primeros días de junio son el momento elegido por los pollitos de aguilucho para romper el cascarón, por lo que ya empezamos a encontrar nidos con pequeñas bolitas de plumón blanco y piel rosada, una imagen difícil de borrar de la cabeza de los que hemos tenido la suerte de encontrarnos con uno de ellos.

Nido de aguilucho cenizo con cuatro huevos

Nido de aguilucho cenizo con seis huevos, algo inusual porque lo normal suelen ser puestas de entre dos y cinco huevos.

Los territorios de los aguiluchos cenizos se extienden por toda la campiña cerealista de Segovia, habiendo encontrado nidos en las comarcas de Santa María la Real de Nieva, Cantimpalos, Turégano o Ayllón.

 Nido de aguilucho cenizo con cuatro pollos de corta edad en su interior

Nido de aguilucho cenizo con dos pollos y tres huevos

Este año se prevé que la cosecha del cereal se adelante debido a la escasez de lluvias durante la primavera, por lo que existe un peligro serio e inminente de que muchos nidos sean arrollados por las cosechadoras si no se localizan a tiempo y se protegen, especialmente los que se encuentran en cultivos de cebada, que se recoge antes que el trigo. Además se ha dado con relativa frecuencia esta temporada la recogida en verde del cereal para forraje, lo que ha provocado la pérdida de la puesta de algunas parejas; en ocasiones hacen una segunda puesta de reposición, pero como es obvio, se retrasa el proceso reproductor y encontrar esos nidos es de vital importancia porque en ningún caso les daría tiempo a terminar con éxito la crianza de los pollos antes de que se recoja el cereal.

Campos de cultivo en la campiña segoviana

Como novedad en esta campaña, contamos con un apoyo extra de voluntarios pertenecientes a un proyecto Life europeo de voluntariado en proyectos medioambientales en espacios de Red Natura 2000 o especies protegidas, como es el caso del aguilucho cenizo, que además figura como Vulnerable en el Catálogo Español de Especies Amenazadas. Darles todo nuestro agradecimiento público al esfuerzo que están realizando, esperando que la experiencia les sea enriquecedora y les anime a participar en próximas campañas, pues pocas cosas hay más gratificantes en el mundo del medio ambiente que poder participar activamente en la conservación de una especie, salvando la vida de pollitos indefensos para que en un futuro nos devuelvan el favor ayudando a mantener el equilibrio en el ecosistema agrícola y evitando la proliferación de plagas.

Voluntarios del proyecto Life buscando aguiluchos

Nido de aguilucho cenizo con cuatro pollos, donde se observa la gran diferencia entre el pollo que nace el primero y el que nace el último, ya que al contrario que otras especies, los pollos de aguilucho no nacen todos a la vez, sino que suele haber un desfase de varios días.